El pasado martes 25 de noviembre el querido Barrio Jardín celebró su 50° aniversario. La plaza del barrio se convirtió en el centro de un encuentro colmado de recuerdos, risas, emoción y el profundo afecto que une a sus vecinos. Padres, hijos y nietos, tres generaciones que hicieron de este lugar su hogar, se reunieron para celebrar la identidad y el futuro de un barrio que sigue creciendo con su gente.
La tarde estuvo marcada por momentos conmovedores, donde el Intendente Emir Andraos compartió anécdotas de su propia infancia, revelando el vínculo afectivo que lo une a estas calles. Entre abrazos y miradas cargadas de significado, todos juntos entonaron el «feliz cumpleaños» y soplaron las 50 velitas de este espacio que no solo es un lugar de residencia, sino una verdadera familia. La Municipalidad de Tunuyán, en un gesto simbólico de crecimiento y arraigo, entregó plantas del Vivero Municipal a cada vecino y vecina, acompañando el espíritu de construcción colectiva.
Los primeros habitantes del barrio fueron protagonistas, compartiendo testimonios que evocan los inicios, la vida cotidiana y ese espíritu solidario que siempre caracterizó al Barrio Jardín. María Elena Rodríguez, vecina, expresó con emoción: «En el 87 llegué a este barrio y tuve la suerte de encontrarme con vecinos que me recibieron con amor. Somos una gran familia. En estos años hemos crecido mucho, este barrio está cada vez más bonito, tenemos luminarias nuevas con cámaras de seguridad. Vivir acá me dio la posibilidad de criar a mis hijos con libertad jugando en esta plaza». Héctor Mazano, otro vecino orgulloso, afirmó: «El mejor barrio del mundo es el barrio jardín que se entregó completo y desde el primer día lo cuidamos. Estoy orgulloso de vivir acá, donde si uno necesita algo solo tiene que golpear la puerta».
Damián Jaramillo, por su parte, compartió una historia de resiliencia y comunidad: «Nosotros llegamos a este barrio con lo puesto. Este es un lindo momento para agradecerle a cada uno de los vecinos cómo nos recibieron y nos trataron. Estábamos atravesando una gran crisis económica y se me ocurrió hacer pan, salí con una canasta y golpeé puerta por puerta y así salimos adelante, hoy tenemos nuestra panadería y realmente es mágico». Estas palabras, junto a los recuerdos de Inés Gallardo, una de las primeras familias en recibir su casa un 25 de noviembre, resaltaron el valor inquebrantable de la ayuda mutua y la amistad que define al Barrio Jardín.
El Intendente Emir Andraos, visiblemente emocionado, destacó la esencia del barrio: «¡Cuántas historias pasaron en esta plaza, en estas calles, cuántos mundiales han compartido entre ustedes! Este barrio tiene la particularidad de tener su propio espacio y ecosistema. Sus casas son como un patrimonio cultural para los tunuyaninos. Me encanta que esta celebración haya servido para que ustedes puedan reencontrarse y celebrarse. Esta es la clara muestra de que cuando las cosas se hacen en comunidad, tienen grandes logros. Todas las conquistas de este y todos los pueblos son en comunidad: cuando todos comparten necesidades, cuando todos tienen sueños, se ayudan, colaboran, se asisten, se abrazan y se quieren. Les deseo a todos lo mejor y feliz cumpleaños para ustedes». Sus palabras resonaron con el sentir de los presentes, reforzando el valor de la unión y el trabajo conjunto.
El broche de oro de la jornada llegó con la presentación del talentoso músico local Jhony Ballesteros, quien brindó un espectáculo lleno de energía y emoción. La celebración se coronó con una gran torta de cumpleaños, compartida por todos los presentes, simbolizando la dulzura de los lazos que unen al barrio. Fue una tarde que recordó el pasado, fortaleciendo los lazos de un presente vibrante y proyectó un futuro lleno de sueños compartidos, homenajeando la historia, la identidad y el prometedor futuro del Barrio Jardín.







